El Mesías no nació en Antioquia

Pues bueno, como a los colombianos no nos gusta quedarnos atrás en nada y propugnamos nuestra superioridad sobre los demás países de América Latina, aunque no lo demostremos ni en un partido de fútbol con el peor equipo de Perú en mucho tiempo, ahora si nos vamos a poner al día políticamente. Como en los años 70, mientras casi toda Latinoamérica estaba bajo dictaduras, nosotros no tuvimos tan grata experiencia, ya se están haciendo las vueltas para tener la dictadura que faltó; porque eso si mire lo bien que dejó Pinochet a Chile.

Nuestro querido Presidente ha decidido por fin irse con toda contra las instituciones del país y proponer un referendo para ver si el pueblo quiere que las elecciones del 2006 se repitan, pues cuando la Corte Suprema decidió que había que revisar el fallo que permitió la reelección, le corrió un frío inmundo por la espalda y decidió apelar a ese maravilloso y omnipresente 84% que lo apoya para mantenerse en el poder, sin importar la legitimidad de su elección. Me imagino que lo de Yidis va tan mal que le tocó inventarse tan lindo mecanismo. Claro, eso si apelando al manido argumento de que es el pueblo el que elige y bla bla bla. Sin duda el pueblo es el que elige, pero para algo están las cortes y todo lo demás: para que este país funcione.

El hecho de que el "artículito" se haya podido reformar con base en un proceso corrupto ya le quita su legitimidad. Pero claro, eso al 84% poco parece importarle, pues al fin y al cabo el bueno es Uribe que pobrecito no lo dejan trabajar esos hp's congresistas, ni los jueces, ni los presidentes de otros países. Se llega a excusar lo que se hizo diciendo que así es que funciona la política. Yo pregunto: ¿Uribe no llegó a la presidencia con un discurso antipolitiquero y anticlientelista? ¿No se supone que iba a reformar esa política podrida que tan mal tiene a Colombia? Entonces si va a seguir con lo mismo, pues no entiendo cómo es la cosa. No obstante, las artes hipnóticas de este gobierno parecen funcionar increíblemente bien, pues nadie se cuestiona estas cosas.

Uribe hará su referendo y muy seguramente lo ganará, y se harán las elecciones, y volverá a ganar: el hipnotismo vía ondas RCNianas es muy efectivo. Y no será para apuntalar los dos años que le quedan de mandato: será para otros cuatro, él no es pendejo. Es más: después a lo mejor dirá que sigue los otros dos, para que vuelvan a quedar las elecciones en el año que deberían ser, el año que coincide con mundial, porque aquí las elecciones presidenciales coinciden con año de mundial de fútbol. Muchos se acordarán de que hay elecciones por el mundial. Y ahí serán otros seis añitos en el poder, tiempo suficiente para inventarse alguna otra cosa para seguir ahí quietico en Palacio. O de pronto desde ya se inventa algo para quedarse un tiempo largo ahí, hasta que se canse de exprimir la presidencia. Amanecerá y veremos dijo el ciego.

Pobre de este país tan lejos de Dios y tan cerca de El Ubérrimo. Pero algún día el espejismo tendrá que terminar y nuestra versión antioqueña de Fujimori se caerá con sus mentiras, sus abusos, sus negocios torcidos y todas las porquerías que tiene escondidas. Aunque estando en el país del Paraco Corazón, a lo mejor se demora. Preocupante si es lo que quiere hacer el señor Uribe, y aún más preocupante si se piensa en toda la gente que le apoya sus bellezas: no sólo la gente corriente que parece estar atravesando por un caso grave de locura colectiva, sino por los paramilitares, los industriales, los narcotraficantes, los medios de comunicación, etc. Vamos a ver que pasa, pero la cosa se ve como mal. Por lo menos para el 16%.

P.D.1: A propósito de lo del 16%: nunca se había sentido tan chévere ser de la minoría.
P.D.2: Si Fidel Castro aprendió con el Bogotazo lo que no debe ser una revolución, con Claudia Gurisatti y Vicky Dávila yo aprendí lo que no debe ser un periodista.