La pachanga libertaria
Se impone escribir sobre las liberaciones.
Con gran alegría hemos visto la liberación de unos cuantos secuestrados que tenían las Farc. Muy pocos en realidad para todos los que están en la selva, pero no por eso menos importante. El domingo liberaron a cuatro de ellos, miembros de la policía y el ejército, y ayer liberaron a Alan Jara, exgobernador del Meta, que resultó ser todo un personaje. Pero vamos en orden.
Lo primero que me parece necesario mencionar, es que es un completo colmo que a los recién liberados, que vienen de unas condiciones bastante precarias y con enfermedades a cuestas, se les lleve directamente del aeropuerto a una rueda de prensa; en el caso de los uniformados, al Palacio de Nariño. Creo que lo primero que se debería hacer es internarlos rápidamente en un hospital y hacerles todos los exámenes habidos y por haber, en aras de saber en qué condiciones de salud vienen. Pero claro, aquí prima el espectáculo y la propaganda. Es una verdadera falta de respeto someter a eso a alguien que viene de la selva después de muchos años de cautiverio. Pero ni modo, así es mi Colombia.
La rueda de prensa-alocución presidencial del domingo, muy parecida a la de cuando el Jaque, excepto por el pequeño detalle del soldado cantor. Desastroso. Pero bueno, haciendo la salvedad de las circunstancias, uno puede tolerar en cierta medida la cosa de la canción compuesta en el secuestro y demás. Pero de verdad que el soldado tiene poco de cantante y compositor. Mas, siendo la canción de alabanza a la Operación Jaque, pues es más que claro que la cancioncita va a estar rodando por ahí dentro de poco y va a ser un hit en las emisoras nacionales. Además, Jhonny Rivera va a estar metido en el asunto, lo que la va a hacer exitosa, sin duda. Con ese talento del señor Rivera, eso va a ser una maravilla, un deleite acústico. Muchas gracias por tu idea Papuchis, no alcanzamos a agradecértelo.
El presidente se salió de los chiros, como raro, y en la rueda de prensa-alocución presidencial sacó a Piedad Córdoba del proceso. Gracias a la ira santa del mesías del Ubérrimo casi se va todo al demonio, dejando a Jara y a Sigifredo López en la manigua. Muy inteligente la decisión del señor presidente de sacar a la persona que hizo los contactos, tenía las coordenadas de entrega de los secuestrados, había manejado todo el proceso y sabía con quien estaba tratando. Casi nada. Pero claro, como los cogieron en su "mentirilla piadosa" y se supo que sí estaban siguiendo los helicópteros de la Cruz Roja, entonces se les subió la bilirrubina y quisieron sacar a la directa responsable del éxito de la operación. Menos mal se echó para atrás y dejó a Piedad Córdoba hacer su trabajo. Si no, la pachanga libertaria se hubiera acabado pronto.
Por la "chiripiorca" del presidente se atrasó un día la liberación de Alan Jara, que debería haber sido el lunes. Pero afortunadamente ayer se concretó el asunto y Jara quedó libre. Llegó al aeropuerto de Villaveciencio cerca de las dos de la tarde y de ahí salió a la rueda de prensa. Y que rueda de prensa. Es increíble la presencia de ánimo de ese señor, teniendo en cuenta por lo que pasó: un tipo con muy buen humor, que hizo gracia de una experiencia tan terrible como un secuestro de siete años. Memorable cuando contó lo de la comida. En fin, todo un personaje, como ya se dijo.
Lo más notorio fue el hecho de que no salió alabando al gobierno de Uribe. De hecho, fue todo lo contrario, y dijo las verdades que a muchos no les gusta escuchar: que el presidente Uribe no ha hecho mucho por la libertad de los secuestrados y que a él le conviene esta guerra inmunda que vivimos. También señaló la falta de voluntad de este gobierno para hacer el acuerdo humanitario, algo que, como lo dijo Jara, en nada debilitaría la todo poderosa seguridad democrática. Que buena cosa, me cayó muy bien el hombre. Pero claro, no se harán esperar las réplicas de la caterva de lambones del uribismo, que llenarán las páginas de periódicos y revistas con columnas diciendo que lo de Jara es sólo un asunto de resentimiento o de estrés postraumático, síndrome que extrañamente no sufren aquellos que salieron del secuestro alabando a la seguridad democrática. Ya veo a María Isabel Rueda y su pésima forma de escribir o a Alfredo Rangel con sus cifras mágicas diciendo que Jara está loco y es un desagradecido. La verdad siempre le duele a este gobierno y a su corte de lambiscones.
Ahora falta Sigifredo López. Esperemos que todo salga perfecto y también se pueda celebrar la libertad del ex diputado del Valle.
Queda por decir que siempre estos eventos son una oportunidad para hacer mofa del cubrimiento periodístico. Llama poderosamente la atención que los periodistas preguntan lo que ya les dijeron:
Yves Heller(CICR): ... irán tres delegados de la CICR y ...
Periodista flaco con cara de gil del canal Caracol: ¿cuántos delegados de la CICR van?
¡Te acaban de decir, carajo!
La otra cosa es que transmiten mucho tiempo algo que se puede decir en una nota corta. El domingo, desde las once de la mañana estaban diciendo que en contados minutos llegaría el helicóptero con los liberados. Llegaron como a las siete de la noche. Ayer con Alan Jara, estaban transmitiendo desde temprano, fuera del aeropuerto donde casi no los dejan entrar, y hablando con cualquiera que alguna vez lo hubiera visto en su vida, y con primos, tíos, abuelos, hermanos, los peces del acuario en una bolsa, el perro, el gato. Exagerada la cosa.
Y para completar, no hacían más que preguntar lo mismo una y otra vez, aún el día de hoy, que le están preguntando lo mismo de ayer.
Bueno, seguir con la alegría de las liberaciones y que se concrete con fortuna la de Sigifredo López. Por ahora, que los uniformados celebren su libertad, al igual que Alan Jara, que le tenían tremenda fiesta en Villavicencio.
¡Pase la mamona, camarita!
P.D. ¿Por qué el título? Porque Mabel Lara, la presentadora del canal Caracol, llamo a todo esto la fiesta de la libertad, así que yo quise ponerle un toque más criollo.
Lo primero que me parece necesario mencionar, es que es un completo colmo que a los recién liberados, que vienen de unas condiciones bastante precarias y con enfermedades a cuestas, se les lleve directamente del aeropuerto a una rueda de prensa; en el caso de los uniformados, al Palacio de Nariño. Creo que lo primero que se debería hacer es internarlos rápidamente en un hospital y hacerles todos los exámenes habidos y por haber, en aras de saber en qué condiciones de salud vienen. Pero claro, aquí prima el espectáculo y la propaganda. Es una verdadera falta de respeto someter a eso a alguien que viene de la selva después de muchos años de cautiverio. Pero ni modo, así es mi Colombia.
La rueda de prensa-alocución presidencial del domingo, muy parecida a la de cuando el Jaque, excepto por el pequeño detalle del soldado cantor. Desastroso. Pero bueno, haciendo la salvedad de las circunstancias, uno puede tolerar en cierta medida la cosa de la canción compuesta en el secuestro y demás. Pero de verdad que el soldado tiene poco de cantante y compositor. Mas, siendo la canción de alabanza a la Operación Jaque, pues es más que claro que la cancioncita va a estar rodando por ahí dentro de poco y va a ser un hit en las emisoras nacionales. Además, Jhonny Rivera va a estar metido en el asunto, lo que la va a hacer exitosa, sin duda. Con ese talento del señor Rivera, eso va a ser una maravilla, un deleite acústico. Muchas gracias por tu idea Papuchis, no alcanzamos a agradecértelo.
El presidente se salió de los chiros, como raro, y en la rueda de prensa-alocución presidencial sacó a Piedad Córdoba del proceso. Gracias a la ira santa del mesías del Ubérrimo casi se va todo al demonio, dejando a Jara y a Sigifredo López en la manigua. Muy inteligente la decisión del señor presidente de sacar a la persona que hizo los contactos, tenía las coordenadas de entrega de los secuestrados, había manejado todo el proceso y sabía con quien estaba tratando. Casi nada. Pero claro, como los cogieron en su "mentirilla piadosa" y se supo que sí estaban siguiendo los helicópteros de la Cruz Roja, entonces se les subió la bilirrubina y quisieron sacar a la directa responsable del éxito de la operación. Menos mal se echó para atrás y dejó a Piedad Córdoba hacer su trabajo. Si no, la pachanga libertaria se hubiera acabado pronto.
Por la "chiripiorca" del presidente se atrasó un día la liberación de Alan Jara, que debería haber sido el lunes. Pero afortunadamente ayer se concretó el asunto y Jara quedó libre. Llegó al aeropuerto de Villaveciencio cerca de las dos de la tarde y de ahí salió a la rueda de prensa. Y que rueda de prensa. Es increíble la presencia de ánimo de ese señor, teniendo en cuenta por lo que pasó: un tipo con muy buen humor, que hizo gracia de una experiencia tan terrible como un secuestro de siete años. Memorable cuando contó lo de la comida. En fin, todo un personaje, como ya se dijo.
Lo más notorio fue el hecho de que no salió alabando al gobierno de Uribe. De hecho, fue todo lo contrario, y dijo las verdades que a muchos no les gusta escuchar: que el presidente Uribe no ha hecho mucho por la libertad de los secuestrados y que a él le conviene esta guerra inmunda que vivimos. También señaló la falta de voluntad de este gobierno para hacer el acuerdo humanitario, algo que, como lo dijo Jara, en nada debilitaría la todo poderosa seguridad democrática. Que buena cosa, me cayó muy bien el hombre. Pero claro, no se harán esperar las réplicas de la caterva de lambones del uribismo, que llenarán las páginas de periódicos y revistas con columnas diciendo que lo de Jara es sólo un asunto de resentimiento o de estrés postraumático, síndrome que extrañamente no sufren aquellos que salieron del secuestro alabando a la seguridad democrática. Ya veo a María Isabel Rueda y su pésima forma de escribir o a Alfredo Rangel con sus cifras mágicas diciendo que Jara está loco y es un desagradecido. La verdad siempre le duele a este gobierno y a su corte de lambiscones.
Ahora falta Sigifredo López. Esperemos que todo salga perfecto y también se pueda celebrar la libertad del ex diputado del Valle.
Queda por decir que siempre estos eventos son una oportunidad para hacer mofa del cubrimiento periodístico. Llama poderosamente la atención que los periodistas preguntan lo que ya les dijeron:
Yves Heller(CICR): ... irán tres delegados de la CICR y ...
Periodista flaco con cara de gil del canal Caracol: ¿cuántos delegados de la CICR van?
¡Te acaban de decir, carajo!
La otra cosa es que transmiten mucho tiempo algo que se puede decir en una nota corta. El domingo, desde las once de la mañana estaban diciendo que en contados minutos llegaría el helicóptero con los liberados. Llegaron como a las siete de la noche. Ayer con Alan Jara, estaban transmitiendo desde temprano, fuera del aeropuerto donde casi no los dejan entrar, y hablando con cualquiera que alguna vez lo hubiera visto en su vida, y con primos, tíos, abuelos, hermanos, los peces del acuario en una bolsa, el perro, el gato. Exagerada la cosa.
Y para completar, no hacían más que preguntar lo mismo una y otra vez, aún el día de hoy, que le están preguntando lo mismo de ayer.
Bueno, seguir con la alegría de las liberaciones y que se concrete con fortuna la de Sigifredo López. Por ahora, que los uniformados celebren su libertad, al igual que Alan Jara, que le tenían tremenda fiesta en Villavicencio.
¡Pase la mamona, camarita!
P.D. ¿Por qué el título? Porque Mabel Lara, la presentadora del canal Caracol, llamo a todo esto la fiesta de la libertad, así que yo quise ponerle un toque más criollo.
Señor Ivan, se pasó con este post. Realmente muy bueno y estoy de acuerdo totalmente con usted. Es increíble que todo el le den palo a la liberación, cuando estos pobres hombres podían decir lo dicho, en poco tiempo e ir a descansar a un hospitalsito, que los consienta la familia y que les den buena comida. Eso era lo que hacía falta, en vez de tanta camara y preguntas chimbas y discursos del presi. También me pareció muy positiva la reacción de Jara, a ver si abrimos los ojos y nos damos cuenta que tal y como ud dice, al presi le favorece esta guerra per secula seculorum.
ResponderBorrarHay muchas otras cosas que me parece que los medios le metieron mucho bombo, como la gana de enfocar a los familiares llorando y eso... no se me parece como momentos privados, de un dolor que los televidentes no comprenden y no tienen por que ver.
Un gran abrazo!!!! <3
Pan y circo, señores. Aunque el pan está más bien escaso en estos días. Saludos.
ResponderBorrarAfortunadamente, Alan Jara no me defraudó. Sigo sosteniendo que es una gran persona. Los medios de comunicación, no defraudaron. No solo hicieron las mismas preguntas a las mismas personas por 10 horas, sino que en esas diez horas no se les ocurrió algún cubrimiento inteligente que hacer.
ResponderBorrarBuen ingreso. Saludos.
Hombre Iván, lo más charro es que a pesar de todo ese cubrimiento tan pendejo de los medios uno sigue pegado al televisor todo el día como si en verdad fuera a llegar en contados minutos. En cuanto a Jara, ya conoce mi opinión, me ha sacado diez mil carcajadas con este texto... buena suerte hombre, vamos a matar un marrano cuando salgan los demás ¿se pega?
ResponderBorrarPero no se supone que los liberados deciden si dan o no la rueda de prensa? no creo que eso sea un imposicion, ellos dicen si si o si no, ademas se lo vio a todos encantados de hablar, me parece.
ResponderBorrarPor otro lado, no se si los medios hiceron bomo o no, lo que si me parece muy bien es que le den tanta importancia a una noticia "postiva" a ver si nos dejamos de tantos drmas no? eso no es usual en los medios colombianos, en ningun medio del mundo, darle tanto borolo a lo bueno y no a lo malo. Los colombianos nos merecemos esas felicidades y mas.
Sentimentalismos? que va! juemadre pero es que aqui nadie expresa lo que siente! y que si a toda colombia se le dio la gana llorara con la liberacion pues que lloren a cantaros! estoy tan mamada de las represiones emocionales! que pena pero me jode que sea un problema ver las emociones a flor de piel, que mamera!
Tarde pero llegué.Creo que comparto contigo muchos puntos de vista respecto a lo de la pachanga libertaria; por ahí escuché que quieren idear una especie de "reglamentación" para los secuestrados recién liberados, algo así como lo es el DIH o los protocolos de Ginebra; con la intención de que dejen de hablar tanto los pobres y otras reglillas. se me hace un poco "extraño" ¿no?
ResponderBorrarSaludos!!!