Che papa

El texto publicado a continuación fue escrito para un concurso de la Revista Anfibia pero, como tantas otras veces, fracasé miserablemente y no me gané ni una patada en la entrepierna. Pero como yo soy el autor-editor de este blog y mis políticas de publicación son laxas y amigas de la mediocridad, aquí va.

***



A Jorge Bergoglio lo eligieron mientras yo me daba puñetazos con las palabras. No en esta variante, la de escribir, sino en la de corregir un texto. La corrección de estilo es un oficio anexo al de escribir y sirve para pagar cuentas mientras lo que uno escribe encuentra un lugar en el mundo distinto a la caneca de la basura. O tal vez nunca salga de ahí. Quién sabe.

Mientras yo me entendía a trompadas con los gerundios mal usados y las comas extraviadas, los cardenales trataban de oír al Espíritu Santo. Una labor más difícil, supongo. Los medios de comunicación del mundo entero, urbi et orbi, tenían sus lentes y micrófonos fijos en la plaza de San Pedro, a la espera del color del humo: blanco o negro. El gris es ambigüedad y Dios no se pone con tonterías: o lo eligieron o no lo eligieron. Nada de empates que esto no es la FIFA.

El televisor de la sala de mi casa estaba encendido en la transmisión desde el Vaticano. Yo trabajaba, aunque un oído estaba pendiente. Las religiones son objetos de estudio muy interesantes, y hoy podemos ver sus escenificaciones a kilómetros de distancia y a todo color. Y cuando de la Iglesia Católica se trata, sabemos que el espectáculo será multitudinario, opulento y en una lengua muerta. Hay que aguantar la precariedad del cubrimiento periodístico de la televisión, generalmente a cargo de analfabetas funcionales, pero no deja de ser atractivo echar uno ojo a estos eventos que han viajado a través de los siglos.

Poco después de las doce del mediodía bajé a almorzar. Según los comentaristas de la televisión, otra fumata estaba por salir. Y salió mientras yo daba cuenta de un buen pedazo de carne. El humo era blanco. Habemus papam. En la plaza, la gente enarbolaba banderas de muchísimos países y gritaba de alegría. La Iglesia tenía líder otra vez. Ahora quedaba la espera para el anuncio en el balcón y la salida del nuevo papa.

Pasó un poco más de una hora. Todo ese tiempo esperé en la sala junto a mi tía, su esposo y mi abuela. Yo no soy católico, pero ellos sí. Ahí estábamos todos, sin embargo. Como dije, es un evento digno de ver, aún cuando uno haya abandonado la religión católica. Y da para hablar de la Iglesia: la corrupción que la azota, la pederastia, el Banco Vaticano, la mafia, los papas que han pasado, la necesidad de renovación. ¿Será que Jesús se enteró de lo que han hecho estos tipos en su nombre?

Por fin salió el cardenal protodiácono, un hombre con cara de haber conocido a Bonifacio VIII, e hizo el anuncio. El papa era Jorge Bergoglio, el cardenal argentino. El papa, por primera vez, nació en Latinoamérica. Júbilo en Argentina, como si fuera 1986, y a lo largo de América Latina, porque aquí nos enorgullecemos de ese tipo de cosas.

Francisco I saludó desde el balcón. Según él, el Espíritu Santo fue a buscar al papa al fin del mundo. Al parecer es un hombre humilde, con buen sentido del humor y carisma.

      —     Ese sí tiene cara de Papa –dijo mi abuela.

A ella nunca le gustó Benedicto XVI. Es hincha de Juan Pablo II, como media humanidad, y Francisco se le parece más.

¿Traerá renovación el papa Francisco por ser de Latinoamérica? Eso cree mucha gente. Pero latinoamericano también fue Marcial Maciel. No es muy probable llegar a papa si la intención es darle un revolcón serio a las costumbres e ideas de la Iglesia. Aunque los papas que quisieron reformar de verdad la Iglesia tuvieron largos y exitosos pontificados. Como Juan Pablo I.

Francisco I habló un rato más, pidió a los fieles una oración por él y su pontificado recién nacido, luego bendijo a la multitud ahí presente y en el resto del planeta. Se despidió con las buenas noches y deseando a todos un buen regreso a casa. Entró de nuevo y las ventanas del balcón se cerraron. Annuntio vobis gaudium magnum: el Papa tiene sueño y debe descansar.

Volví a subir al estudio. El Espíritu Santo y los cardenales habían hecho su trabajo y yo debía volver al mío. Al fin y al cabo, el Vaticano no paga mis cuentas.

Comentarios

  1. Нello, I do bеlieve your blоg сοuld possibly be having bгοwser compatibіlіty issues.
    Whеneѵer I take a look at уοur
    sitе in Sаfari, it looκs fіne hоwеver ωhen οpening in Ӏ.

    E., іt's got some overlapping issues. I simply wanted to give you a quick heads up! Besides that, great blog!

    Take a look at my web-site v2 Cigs reviews

    ResponderBorrar
  2. No matter if some one searches for his necessary thing,
    so he/she needs to be available that in detail, therefore that thing is maintained over here.


    Also visit my webpage - skin lightening surgery

    ResponderBorrar
  3. WOW just whаt I was ѕearching for. Came here bу
    sеarching fоr programmаble potеntіomеter

    Feеl free to surf to my web page; rotary Potmeter

    ResponderBorrar
  4. Hey There. I discovered your blog the use of msn.
    That is an extremely well written article. I will make sure
    to bookmark it and return to read more of your useful information.

    Thanks for the post. I'll certainly comeback.

    Here is my blog :: twitter retweets free way to get more instagram followers

    ResponderBorrar

Publicar un comentario

Entradas populares